A mi personalmente no me gustaban demasiado los interiores, extremidades y demás “porquerías” de los animales. Dicen que del cerdo se aprovecha todo. En este caso, el bar Orellas de Ourense (Santo Domingo 2), nos ofrece varios platos típicos, pero las orellas del Orella son algo fuera de serie. Están continuamente sirviéndolas, las sirven inmaculadas y en su punto, le añadimos pimentón picante al gusto y las acompañamos con el buen pan gallego y con una jarrita de ribeiro. Imprescindible en las visitas a Ourense.
martes, abril 10, 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario